Nos veremos cuando el destino tenga ganas de juntarnos.

Ahora vuelve a decirme que ya no es igual, que saber lo que siento te hace dudar entre ser amigos o no serlo. Dime que tengo la culpa de todo, que no te he querido nunca. Dime que lo nuestro ya ha acabado y entonces sera cuando de verdad te demuestre lo que siento. Dime que tus palabras no fueron tuyas, que el abrazo me lo diste por pena y entonces a partir de ese momento dejare de creerte. Hoy como decias sí a un haz lo que surja. Al final es verdad, no surgio nada. Fue un simple abrazo de esos que te alegran la noche y cada vez que pasas por ese sitio te acuerdas de él, del olor que te dejo. Esos olores que te gustaria que los vendieran en frasquitos de perfume para sentir que nos estamos rozando. Pero tú estas intentandome convencer de que todo se ha ido, yo no me lo creo, se que hemos nacido el uno para el otro. El destino lo sabe.